El retrato de Vincenzo Anastagi, caballero de Perugia y combatiente contra los turcos en el asedio de Malta en 1565, por lo tanto Caballero de la Orden de Malta.
En la obra resalta la armadura plateada, sobre una base que la forman los pantalones de terciopelo verde y medias blancas, mientras que en el suelo se contempla el casco y la firma del pintor en la pared.
La pincelada de El Greco es libre y suelta en los pantalones, el cortinaje o las paredes, en cambio la destreza y el detalle brillan en la armadura y en el rostro del personaje. El pintor manifiesta una tendencia casi al estilo de Tiziano.