Los frescos de la iglesia de Stª María en Skrilinah,
(Beram) son probablemente, los más
famosos de la península de Istria. Están en un pequeño
ermitorio con un pequeño cementerio romántico adosado en la
parte posterior, en un paraje impresionante.
Estas pinturas medievales
(1474), son unos frescos del último gótico, cubren casi totalmente las paredes interiores de la iglesia.
Obra del maestro Vincent
de Kastav. La escena más
impactante es la de la Danza
de los Muertos, donde comerciantes, cardenales, e incluso el mismo Papa
bailan junto a la muerte. La pintura que ocupa un espacio más grande es la Adoración de los Reyes. El ciclo es una simplificación muy tradicional, se centran en una única
narración.
En
el siglo XVIII, la iglesia se amplió y en la renovación se taparon con nuevos
frescos. En 1913 se redescubrieron y restauraron tal como están actualmente.