Los frescos de la iglesia de Stª María en Skrilinah,
(Beram) son probablemente, los más
famosos de la península de Istria. Están en un pequeño
ermitorio con un pequeño cementerio romántico adosado en la
parte posterior, en un paraje impresionante.
Estas pinturas medievales
(1474), son unos frescos del último gótico, cubren casi totalmente las paredes interiores de la iglesia.
Obra del maestro Vincent
de Kastav. La escena más
impactante es la de la Danza
de los Muertos, donde comerciantes, cardenales, e incluso el mismo Papa
bailan junto a la muerte. La pintura que ocupa un espacio más grande es la Adoración de los Reyes. El ciclo es una simplificación muy tradicional, se centran en una única
narración.
En
el siglo XVIII, la iglesia se amplió y en la renovación se taparon con nuevos
frescos. En 1913 se redescubrieron y restauraron tal como están actualmente.
Verdaderamente impactante. Al natural tiene que ser la hostia.
ResponEliminaBaci a farfalla.
La verdad es que impacta todo el conjunto, el lugar presenta una paz inmensa y la belleza de la obra es rival de la naturaleza que lo circunda.
EliminaUn lugar para visitar, ya no te digo para reposar en la eternidad.
Baci.
Conservan el hieratismo bizantino. Impresionante.
ResponEliminaSalud
Francesc Cornadó
Invita al recogimiento este simbolismo y la sencillez de esta iglesia. Y sobre todo la luz que impacta en los frescos un lugar idóneo para conciliarse de tanta ostentación.
ResponEliminaUn saludo.
Un rincón para la belleza.Un beso
ResponEliminaEs una placer visitar este espacio pleno de exquisitez y buen gusto.
ResponEliminaSaludos
Muchas gracias.
EliminaSALUDOS.